Appetite for Destruction

Un día como hoy, el 6 de agosto de 1988, Appetite for Destruction, el explosivo álbum debut de Guns N’ Roses, alcanzaba el puesto número 1 en el Billboard 200 tras un lento pero imparable ascenso. Lo que comenzó como un disco polémico y resistido por las grandes cadenas, terminó siendo una de las obras más vendidas y celebradas de la historia del rock. Lanzado en julio de 1987, el álbum no tuvo un impacto inmediato. De hecho, pasó varios meses en los estantes sin demasiada atención. Pero todo cambió cuando el videoclip de “Welcome to the Jungle” comenzó a rotar en MTV, seguido por “Sweet Child o’ Mine”, que se convirtió en un hit mundial.
La banda —formada por Axl Rose, Slash, Duff McKagan, Izzy Stradlin y Steven Adler— trajo una actitud cruda, peligrosa y real en un momento donde el glam metal dominaba los escenarios con maquillaje y brillo. Guns N’ Roses era la respuesta sucia y auténtica de la calle. Con más de 30 millones de copias vendidas en todo el mundo, Appetite for Destruction es considerado el álbum debut más vendido de todos los tiempos. Cada tema del disco —desde la intensidad de “It’s So Easy” hasta la épica “Rocket Queen”— ayudó a construir una leyenda que sigue viva hasta hoy
El éxito del álbum consolidó a Guns N’ Roses como una de las bandas más importantes de fines de los 80 y principios de los 90. Su influencia se extendió mucho más allá del hard rock, marcando a generaciones enteras de músicos y fanáticos.